
Mientras el resto de los invitados permanecía en la terraza, ella entró a la cocina, a preparar unos tragos. Esta es mi oportunidad, pensó él, siguiéndola disimuladamente. Ella era una mujer hermosa, con todo el aire de juventud que le brindaban sus 30 años. No tenía unos grandes pechos, pero su figura era espigada y muy bien conformada. Su cola, que era causa de muchos desvelos para él, se adivinaba redonda, turgente, una tentación. Vestía una colorida pollera, amarrada a un costado, la que se entreabría al caminar, mostrando el comienzo de un muslo blanco y consistente. El se aproximó por detrás de ella, en el estrecho pasillo de su cocina, procurando rozarla, como en forma descuidada. Podía haberlo hecho de espaldas a ella, pero el control de sus acciones ya no estaba en su mente, sino que era asumido por su sexo, como era común en circunstancias semejantes de seducción, de manera que pasó detrás de ella de manera intencional, refregando tenuemente su paquete por sus nalgas. La sensación fugaz de sentir la verga alojada por un segundo en esa cola maravillosa causó un efecto instantáneo en su pene. Perdón, le dijo, ¿dónde están los vasos?, en forma inocente. Ahí, en la puerta de arriba, repuso ella mostrando la repisa a la vez que se daba vuelta rápidamente, reaccionando indudablemente al roce y mirándole fijamente. En esa fracción de segundo él percibió que lo había sentido. Pero no hizo ninguna otra manifestación evidente. Los ojos del hombre permanecían fijos en ese soñado trasero. Volvió a pasar, repitiendo lo mismo. Pero además decidió jugar la carta decisiva. Al momento de enfrentar su cola, detuvo un segundo el desplazamiento y le hizo sentir su levantamiento. Ella interrumpió lo que estaba haciendo, y apoyó sus manos en la mesa.
Vas a pasar o …,
¿O qué?- le dijo él, desafiante- ¿te molesté?, agregó, casi en su oído. Percibió su exquisito perfume. No, pero me parece que ya encontraste el vaso, ¿no?. Si, lo tengo en la mano… le dijo él, en un tono picaresco.
Claro, pero noto que buscas algo más, dijo ella.
¿Lo notas, realmente?, y me podrías ayudar a encontrar ese algo más, contestó, sin aflojar la presión contra su deliciosa colita… Lo sorprendente era que habían pasado cinco segundos, en ese diálogo, y la tenía perfectamente empalmada. Su verga, levantada bajo el pantalón, ajustada entre sus nalgas y ella sin variar su posición.Podría ser, repuso ella, pero no es el momento...concluyó en forma desafiante, al tiempo que dio un leve respingo hacia atrás, regalándole un apretón contra su verga, que lo hizo arder. Allá abajo, se derramaba una gota de líquido en agradecimiento. Quedó paralizado, mientras ella salía de la cocina, cimbrando su cuerpo con altivez. Tardó unos instantes en reponerse y analizar lo ocurrido. Sin duda, algo había pasado, que presagiaba un buen futuro. Con lo avanzado, no dejaría de insistir en el resto de la velada.
Vas a pasar o …,
¿O qué?- le dijo él, desafiante- ¿te molesté?, agregó, casi en su oído. Percibió su exquisito perfume. No, pero me parece que ya encontraste el vaso, ¿no?. Si, lo tengo en la mano… le dijo él, en un tono picaresco.
Claro, pero noto que buscas algo más, dijo ella.
¿Lo notas, realmente?, y me podrías ayudar a encontrar ese algo más, contestó, sin aflojar la presión contra su deliciosa colita… Lo sorprendente era que habían pasado cinco segundos, en ese diálogo, y la tenía perfectamente empalmada. Su verga, levantada bajo el pantalón, ajustada entre sus nalgas y ella sin variar su posición.Podría ser, repuso ella, pero no es el momento...concluyó en forma desafiante, al tiempo que dio un leve respingo hacia atrás, regalándole un apretón contra su verga, que lo hizo arder. Allá abajo, se derramaba una gota de líquido en agradecimiento. Quedó paralizado, mientras ella salía de la cocina, cimbrando su cuerpo con altivez. Tardó unos instantes en reponerse y analizar lo ocurrido. Sin duda, algo había pasado, que presagiaba un buen futuro. Con lo avanzado, no dejaría de insistir en el resto de la velada.
2 comentarios:
Y pensar que todo lo que se ha escrito puede llegar a suceder......
QUE PIENSAS TÚ?
Felicitaciones.... me gustan las escenas que pintas... nada es mas real que eso, ha sucedido tantas veces.
Publicar un comentario